jueves, 16 de diciembre de 2010

Diciembre 16

Léase el Salmo 126

Leyendo el Salmo 126 en la temporada de Adviento nos ayuda a recordar que la vida se mueve en ciclos. Hay tiempos de felicidad y tiempos de tristeza, y a lo largo de estos dos tiempos la gente clama a Dios para que este con ellos. Este Salmo me hace pensar en los ritmos de la vida, y me recuerda que los buenos tiempos son para ser disfrutados y apreciados, pero su naturaleza es transitoria. El recuerdo de la alegría pasada puede llevarnos a través de una gran tristeza. Las experiencias de alegría y tristeza en nuestras vidas nos dan la empatía y la capacidad de ayudar a otros durante sus momentos de dolor y pérdida. Al ver a otros llorando y luchando, el recordar las palabras del Salmo 126 puede ayudarnos a orar, a confortar a otros, y a actuar de manera que llevemos paz y alegría al mundo. ¿Quién en tu vida necesita consuelo y apoyo en esta temporada?

ORACIÓN

Espíritu Santo, recuérdanos estar presente en este momento y lugar, mientras mantienes en nuestros corazones el recuerdo vivo de Tu Gracia. Ayúdanos a ser felices mientras hacemos el trabajo que nos mandas en el mundo. Permítenos ser sinceros y solidarios hacia los demás y trabajar por la paz en nuestras vidas, la comunidad, y el mundo. Amén.

Molly Williams, Asistente de Programa de la Oficina de Preparación para el Ministerio del Concilio de Misión de la Asamblea General, Louisville , Kentucky

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